Ley de las similitudes
Descubierta por Hipócrates, esta ley ( base de la medicina Homeopática ) dice que toda sustancia capaz de provocar determinados síntomas en un individuo sano será capaz también de curar síntomas semejantes que presentan enfermedades naturales. Dicho de otra manera, es una ley biológica general que constata el paralelismo de acción entre el poder toxicológico de una substancia y la acción terapéutica de la misma.
Un clásico ejemplo es el de la picadura de la abeja, que provoca signos objetivos como es el edema rosado a causa de la acción rápida y brutal del veneno, además de los síntomas objetivos como es la picazón ardiente que mejora al aplicar frío.
Por tanto, si nos atenemos a esta ley y aplicamos un remedio a partir de abejas maceradas, podríamos emplearlo en toda enfermedad que presente síntomas similares y no solamente en las picaduras de insectos. Algunas enfermedades con sintomas similares son la conjuntivitis, las urticarias y cualquier otra que presente picazón o punzadas ardientes, edemas rosados, que sean de aparición brutal y que mejoren con el frío.